UN TERNERO SE COME LA VACA AZUL

Luego la gente critica mi enorme sueldo, pero ya lo dijimos: con un circuito a todo gas y con todos los pilotos en pista, los bizarros más favorecidos serían -aparte del inefable Sweet, que cuenta sus intervenciones por botijos- Sato, Pelocurva y Machetero. Pues bien metimos a 4 en los 5 primeros puestos (se coló en la 4ª posición, brillantemente, Breakneck, que presenta candidatura para futuros podios).

Probablemente, hayamos presenciado el Gran Premio más igualado y abierto de los celebrados hasta ahora. La escasa longitud del circuito unido a que todo él se puede hacer con acelerador a tope (con bellas curvas, entre las que destaca la de la caseta donde los pilotos tenían que lograr un difícil equilibrio entre derrape y agarre que hizo las delicias de todos) ocasionó que los pilotos acabaran sus mejores tiempos en el mismo segundo, salvo Sweet (que fue el único que bajó de los 24´´, con 23,937, a la sazón vuelta rápida) y que hubiese una distancia del mejor al peor tiempo de tan solo ¡8 décimas de segundo! (los 24,791 de Cesare)

Así de apretadillo estuvo el asunto.

Empero, las hostilidades no se desataron por delante y Sato (24,130 como mejor vuelta, sólo detrás de Sweet) se aburrió de lo lindo corriendo en la soledad del ganador, durante todo el gran premio. Pelocurva (24,230 como mejor registro en vuelta) fue el único que pudo presentar alternativa, pero el trabajo de zapa de Cesare (piloto con vuelta perdida que se resistía a asumir su papel y echarse a un lado cuando llegaban de nuevo los rivales, como buen bizarro) impidió que pudiese alcanzarle en ningún momento. Aún así acabó a sólo 4 segundos y pico del ganador.

A este hecho, hay que sumar la tremenda colisión que tuvo el siempre seguro Sweet en las primeras vueltas, lo que le hizó perder dos puestos al pasarle Breakneck (24,353) y Castle (24,495) momentáneamente. Éste último protagonizó, viniendo desde atrás, una gran remontada que le llevó del 7º al 3º puesto, hasta la última curva de la última vuelta, cuando un choque con Sullivan le hizo dar la vuelta, quedarse mirando a Cuenca y perder cualquier opción, no sólo de podio, sino también de puntuar siquiera. El piloto presentó recurso contra la Federación pero, como era domingo, estaba cerrada y no se atendió la queja del afamado bizarro.

Los pilotos discurrían vuelta tras vuelta viendo el culo de su rival delante y pudiendo limar escasas décimas por vuelta. Por esta razón el podio coincidió con la línea de salida (Pole para Sato, la primera, lo que hace que su fin de semana haya sido redondo). Inmediatamente después se observan ligeros cambios, como el de Breakneck por Machetero (24,440). El primero salio en 5ª posición y acabo el 4º y el segundo viceversa.

Por la parte de atrás, tenemos que destacar la mayor remontada protagonizada por el mito viviente del renting kart, Botijo (24,595), quien saliendo del puesto 11º de la parrilla ascendió hasta el 6º puesto y se quedó a 16 centésimas del 5º lugar de Machetero. No obstante, Toro Rossa hizo un auténtico papelón -otro- al no asumir Botijo su papel de escudero de Auto-Cad (24,618), el cual salió en 6ª posición de la parrilla. En vez de facilitar el trabajo del soltero por poco tiempo, entró en dura pugna, pese a ser su compañero de escudería, y le echó de la pista por dos ocasiones según palabras del propio Auto-cad. Un auténtico bochorno para alguién que estuvo y no acaba de asumir que probablemente no vuelva a estar, a menos que se someta a una disciplina de entrenamiento y deje sus noches locas por los garitos de nuestra capital -¡qué pena!, por lo menos nos queda su magisterio, que cada vez se deja ver en más escasas gotas-.

Una vez Auto-cad dio por perdida la cabeza y el juicio de su ¿compañero? ¿de equipo?, se dedicó a mantener una bonita pugna con Moderatespeed (24,521) quien esta semana le tocó ir por detrás de su compañero de escudería, Breakneck, el cual parece haber cogido tono para la segunda mitad de campeonato, como hemos señalado.

El trío de cierre lo formó Luso Mendes, en franca aunque no suficiente evolución (8º mejor tiempo de vuelta rápida, no obstante, 24,585), el ya mencionado tapón de Cesare (el único que hizo labor de equipo para su compañero Machetero, por más que éste no la aprovechara, dado que nunca se empleó a fondo porque es deportista pluriempleado y piensa correr el MAPOMA el próximo domingo) y la fugaz intervención de Sergio (25,055), piloto de pruebas de Ruedas de Fuego, que pagó la novatada, la hora de acostarse la noche anterior, y, sobre todo, su pésimo régimen de hidratación durante las 24 horas anteriores a la carrera, lo que le llevó a retirarse en el primer tercio de gran premio.

Para los amantes de la conspiración tan sólo un dato: ¿Quién concertó y reservó el circuito de Burgueño para esta segunda prueba de la FB?. Pues sí, han acertado el mismísimo flamante ganador del mismo: nuestro buen Sato. Una simple coincidencia, estoy seguro.

Entiéndase esto como mera información, sin que se trasluzca de mis palabras la más leve duda a cerca de su merecido triunfo.

Mercecido ¿Verdad?